También la he podido titular MALA PATA.
Ha sido una maratón más, la número nueve. La maratón en la que he hecho el peor crono y en la que más he sufrido para prepararla.
Desde que el 22 de octubre me hiciera un esguince de tobillo grado 2-3 no he podido entrenar con normalidad, ni andar con normalidad.
Aún así decidí entrenar el maratón, casi sin tiempo ya que empecé a correr a primeros de enero y sin forma, además de entrenar con dolor. Eso sí. He tenido la gran ayuda de los compañeros del club, ellos han estado tirando de mi para que saliera a entrenar y animándome día a día.
La idea era correr para ir normalizando la situación y entrar en la rutina. Para ello me puse en las manos de la clínica de fisioterapia de Salas Lluch para que me ayudaran en la rehabilitación del tobillo.
Las semanas iban pasando muy rápido y yo no iba dando los saltos de calidad que se exigen para correr una prueba tan exigente.
Con estas me presento la semana de la maratón terminando de pasar la gripe, con un poco de anemia y el tobillo regular, con un 60% de la movilidad normal. Después de estar pensándolo hasta el último día decido presentarme a la prueba para terminarla.
Salgo con los compañeros de club hacia la salida, todo el mundo muy nervioso y yo creo que es la primera vez que no siento nada antes de salir. Las sensaciones antes de una maratón son, por lo menos en mi caso, muy especiales, no es miedo, nervios si, es una sensación indescriptible ya que en una prueba de este tipo tienes mas que perder que ganar. Al terminar una maratón siempre hay más perdedores que ganadores y no me refiero al que coge la copa. Me refiero a que todos queremos conseguir mejor marca que la que hacemos. Muy pocos consiguen el objetivo. Para conseguir el objetivo se necesita entrenar para ese objetivo y que el día de la carrera vaya todo bien.
Para que todo vaya bien el día de la carrera se tienen que alinear varios astros.... la comida del día anterior sea la idonea, pasar por el WC, geles, agua, isotónico, temperatura, humedad, viento y cabeza a la hora de tomar decisiones en carrera... Antes de salir a correr, cuando estás en la linea de salida se te pasan muchas de estas cosas por la cabeza.
C.A. Gerena |
Salgo a verlas venir, el ritmo es bueno, tenía pensado ir a un ritmo en la primera parte de carrera de 4:55 min/km pero voy a mas o menos a 4:45 y cómodo. Así pasan los kilómetros y yo sorprendido. Se que no puedo llegar así a la meta ya que no he entrenado para estos ritmos pero al ir cómodo pues no intento controlarlo. No es que vaya constante ya que hay kilómetros que salen a 4:40 y otros a 4:50 pero el pulso por ejemplo está muy estable. Veo a mi madre animándome a mi mujer a mi niño en varios sitios con la familia de Francis. Mucha gente animando y muy bien la organización en los primeros kilómetros.
Paso la media maratón en 1h 40 min a un ritmo de 4:46 min/km mas o menos. Ya empiezo a notar el cansancio y la falta de entrenos, aun así sigo por debajo de 5 min/km hasta el avituallamiento del km 25. Allí me doy cuenta que voy sin fuerzas y empiezo a regular el ritmo. Es curioso que el pulso no se altera pero la luz de la reserva va encendida. Empiezo a sufrir y pienso que me quedan 10 km muy duros hasta la plaza de España.
Llegando al Benito Villamarín me adelanta el globo de las 3h 30min. Ni me inmuto. La idea es llegar a meta pero no hacer ningún tiempo.
Como siempre el paso por la plaza de España espectacular, llevaba a dos catalanes al lado y iban flipando con el recorrido. Al tener el tobillo tocado noto más que nunca las baldosas de la plaza de España y de la avenida de la constitución que como siempre, se hace un gran pasillo para los corredores. Es el punto mas espectacular de la maratón, esa avenida llena de gente gritándote es impresionante. Saco fuerzas de donde ya no hay y de nuevo mucha gente en la Alameda de Hércules. Ya es km 40, esto está hecho, antes en otras ediciones llegar a Barqueta no te decía mucho ya que quedaban 6 km interminables por el Alamillo, esta vez no, esta vez solo había 2 km hasta meta.
Foto de Run Online |
Al final 3h 39 min. Muy feliz de acabarla.
Ya van nueve maratones. Cinco de ellas en Sevilla. todas las de Sevilla de forma consecutiva.
En estos cinco años esta maratón se está transformando, no se en que pero se está transformando. Está empezando a tener detalles de gran maratón, pero comete unos fallos tremendos de Cutre Maratón. Algún día esta burbuja que entre todos estamos alimentando explotará y no habrá más maratón de Sevilla.
Quiero dar las gracias a todos los voluntarios, fotógrafos y amigos que de forma desinteresada están ahí siempre. En especial dar las gracias a un grupo de personas denominadas "Salvemos la Maratón de Sevilla" en las que tengo grandes amigos, por el trabajo de estos meses y creo que el bien que le están haciendo a este deporte.